Personalidades

María Paulina Camejo

“Yo si tengo mi Santos”

Por Rossana Azuero

El ideal cuando se lee un libro es que se espera que nos cautive, que nos asombre o que nos divierta. Y esto es lo que encontramos en las obras de la escritora venezolana María Paulina Camejo quien, a los veinte años, por cuestiones políticas que afectaron directamente a su familia, tuvo que dejar su país y emigrar a los Estados Unidos, ella posee una licenciatura en Historia del Arte y Literatura Hispana por la Universidad de Miami.

En nuestra entrevista María Paulina nos dice que en su segunda novela “Los complicados amores de las hermanas Valverde”, describe tres entretenidas, pero complejas historias de tres chicas de una familia católica y en sus experiencias al conocer a sus improbables enamorados: un ateo, un preso político y un tutor de matemáticas.

“Al principio yo iba a hacer un libro con una protagonista, que probablemente se hubiera llamado los complicados amores de Julia Valverde o de Cristina Valverde, pero como quería contar la historia de lo que es la católica con el ateo, o la chama que se enamora de un preso político y luego me pareció que contar dos historias tan complicadas tenía que tener esa magia por eso cree una tercera historia, que es la que viene a dar ese equilibrio con la pequeña Luna.

Sí, porque tienes a una con el de ¡nunca creí que me iba a enamorar de un ateo, que hago!, la otra enamorada del preso, que es tremendo rollo porque la relación como viste se desarrollaba en las visitas a la cárcel y la familia no se lo podía creer, ¿Cristina? la que no quería tener novio porque le parecía que en una cárcel se había enamorado de un preso”.

En “Beatriz decidió no casarse”, ficción y realidad se dan cita ya que encierra una reflexión sobre la condición humana, en un punto límite en el que la ira y la ternura corren parejas por sus páginas.

La escritora lo desarrolla tomando cosas de su propia vida, pero recalca: “Yo quería contar la verdad ya que mi papá fue preso político en el 2011 en Venezuela, como Salvador, pues detrás de lo que es una historia de amor y donde pretendí que fuera bonita, romántica y divertida, pero a la vez contar lo que está pasando en mi país en donde los presos no pueden salir al sol sino una sola vez a la semana y eso cuando tienen suerte. Así que aparte de contar realidades, que son crudas, la novela es fácil de leer y ligera”.

Cuando los padres de María Paulina Camejo tuvieron el libro en sus manos, la autora entendió que la literatura era el trabajo al que se quería dedicar, porque escribir finalmente es eso: una verdadera pasión.

“Mis padres se sintieron muy orgullosos, les encantó y tengo que decirlo que ellos siempre creyeron en mi cuando les dije que lo mío era ser escritora, por eso es que les dedico este libro.

Y agrega:

“Beatriz que ha sido mi primera novela es un asunto emocional con los personajes: Beatriz dedicó toda su vida a cumplir su único sueño, el cual era ser una escritora exitosa y reconocida. Han pasado veintitrés años desde que terminó con su novio Santos, con quien había disfrutado de una bella relación, pero en el avión que la lleva se reencuentra con Santos y juntos rememoran momentos que ninguno ha olvidado, como el amor de su vida al que dejó para centrarse en su carrera.

Esto pasa y por eso lo escribí para que muchos se sintieran identificados. A mi Santos me encanta, ojalá existieran muchos, aunque tengo que reconocer que yo si tengo mi Santos, mi novio, mi mejor cómplice”, admitió entre risas.

Los libros de María Paulina Camejo no se leen como quien lee un periódico, tienen un efecto especial y te hacen pasar el tiempo de una manera en que uno no se da cuenta.